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  • Cómo ejecutar experimentos de Growth Hacking

    Anteriormente hemos hablado de las palancas de crecimiento; la experimentación, por su parte,
    estará inicialmente enfocada a validar dichas palancas y, una vez validadas, su objetivo será su
    continua optimización. En concreto, cada experimento que hagamos será un intento de hacer
    crecer nuestro negocio.


    A continuación te especificamos en qué consiste la realización de experimentos y cómo se deben ejecutar para garantizar el máximo seguimiento:


    PASO 1

    Siempre que experimentemos lo haremos buscando el crecimiento de negocio y, por ello, lo
    primero que tendremos que preguntarnos es ¿Cómo vamos a crecer? ¿Qué queremos optimizar?


    Para responder a esa pregunta tendremos que recurrir al funnel. ¿En qué parte del funnel
    queremos actuar? ¿Queremos llegar a más gente? ¿Queremos que la gente que ya nos conoce
    nos compre más? ¿Queremos aumentar el ticket medio? ¿Queremos recuperar clientes antiguos?


    PASO 2

    Supongamos que queremos optimizar la fase de activación y que una de nuestras palancas
    principales
    es el email marketing. Si vamos a actuar sobre dicha palanca, lo primero que
    deberemos hacer es relacionar dicha palanca a la métrica con la cual vamos a medir su
    rendimiento para saber así si hemos logrado optimizarla.

    Por ejemplo, en el caso de querer optimizar la fase de activación mediante la palanca del email
    marketing, podremos querer optimizar la tasa de click.


    PASO 3

    El siguiente paso - que siempre es una realidad en un ámbito de experimentación - es formular
    una hipótesis
    . Tal hipótesis debe seguir la filosofía SMART y ser así específica, medible,
    alcanzable, relevante y temporal.

    Posible hipótesis: “Creo que si personalizamos los emails incluyendo el nombre del usuario, este
    conectará más con nosotros y durante el siguiente més habrá un aumento del 10% en la tasa de
    click”.

    Un punto relevante es que, probablemente, cuando establezcamos sobre qué palanca queremos
    actuar se nos ocurrirán múltiples maneras de hacerlo; en dicho caso, debemos ejecutar los
    experimentos uno tras otro y de manera secuencial; nunca simultánea.


    PASO 4

    En el caso de que tengamos diferentes experimentos posibles a ejecutar, existe una fórmula para
    medir por cuál vale la pena optar: el ICE Score, una manera de medir que tiene en cuenta los
    siguientes parámetros.

    • El impacto que puede tener en caso de funcionar.
    • La confianza que se tiene en que funcione.
    • Su facilidad de implementación.

    Para elegir el experimento que ejecutar hay que puntuar los tres parámetros del 1 al 10 en todas
    las opciones que contemplemos y multiplicar los 3 valores (impacto x confianza x facilidad).


    PASO 5

    Una vez hemos medido cuál es el experimento que vale más la pena ejecutar, toca pasar a la
    acción, pero el proceso no termina aquí.

    Lo más importante va a ser, durante todo el periodo que dure el experimento, llevar un registro de
    este mediante todas las métricas que le hayamos asignado. Durante todo el experimentos
    debemos documentar todo lo posible sobre el impacto que ha tenido la acción ejecutada, cómo se
    comporta el público, si reaccionan, interaccionan, si la hipótesis que habíamos formulado era
    acertada o desacertada... etc.


    PASO 6

    Por último, todo experimento lleva consigo un aprendizaje y este debe quedar registrado en algún
    sitio. Tener un registro de todos los experimentos que llevemos a cabo y los resultados que
    obtenemos de estos va a ser lo que, cuando llevemos un alto volumen de experimentos
    ejecutados, nos empiece a dar información extra.


    Podremos empezar a detectar patrones: ¿Qué tienen en común los experimentos que han
    funcionado?
    ¿Hay algunas técnicas que funcionen mejor que otra? ¿La gente responde mejor a
    través de ciertos canales o medios?


    Toda esta información extra te permitirá así acertar más en un futuro, retroalimentando la rueda de
    crecimiento
    .


    Así pues, podemos ver que el proceso para ejecución de experimentos sigue una metodología
    que, a modo de resumen, podrían listarse los siguientes pasos:

    • Paso 1: Elegir qué queremos optimizar.
    • Paso 2: Escoger la palanca que vamos a usar.
    • Paso 3: Formular una o varias hipótesis.
    • Paso 4: Medir por cuál de los diversos experimentos posibles vale la pena empezar. 
    • Paso 5: Ejecución, seguimiento y registro.
    • Paso 6: Documentación para el futuro.


    Resulta muy útil adquirir el hábito de experimentación para así poder obtener en un periodo
    relativamente corto un listado de aprendizajes del cuál podamos extraer información que
    retroalimente nuestra rueda de crecimiento.