El founder market fit se puede definir como el encaje entre el fundador de un negocio con la idea
de negocio adecuada dada su experiencia, personalidad y red de contactos. En otras palabras, es el encuentro que tiene un fundador con
aquella idea de negocio para la cuál él o ella encaja lo máximo posible.
Este encuentro entre el founder y la idea de negocio se da cuando el primero siente una
motivación especial e incluso personal para llevar esa idea a la realidad, tiene altos conocimientos
sobre esta ya que es un sector que le interesa e incluso puede tratar de cubrir una necesidad que
él/ella mismo/a ha tenido en el pasado y que no ha podido cubrir (o lo que la ha cubierto no le
satisface lo suficiente).
Suelen presentarse 4 rasgos principales cuando se da un founder market fit:
- Obsesión por la idea
- Historia personal
- Personalidad
- Experiencia en el sector
Obsesión
La motivación que el fundador siente por esa idea de negocio es tan grande que sencillamente
necesita llevarla a cabo. No necesita plantearse si quiere hacerlo o si está dispuesto a dedicarle el
tiempo necesario porque es algo que tiene tal prioridad para él que ocupa todos sus ratos libres
con ello. No hay nada que la persona prefiera estar haciendo en su lugar; ocupa sus momentos en
blanco en pensar en esa idea de negocio, sueña con ella y siente que realmente sabe cómo debe
ser ese negocio para que tenga éxito. Necesita llevarlo a cabo.
Cuando un fundador siente tal obsesión no lleva a cabo esa idea de negocio porque quiera
emprender o porque quiera dirigir su propia empresa; lo hace sencillente porque siente un
profundo impulso interno.
Esta obsesión suele venir acompañada de conocimiento del sector. El fundador sabe cuáles son
los actores del sector, los competidores actuales, las necesidades del consumidor y los actores
potenciales.
Historia personal
A los clientes les gusta poder identificarse con los fundadores de una empresa. Cuando se les dice
que quien ha fundado una marca es un hombre que ha visto una oportunidad de mercado no
sienten nada por esa persona y tampoco establecen una especial conexión con la marca.
Por el contrario, cuando el fundador tiene una historia que contar, un por qué necesitaba levantar
ese negocio se da un match no solo del fundador con el mercado si no también del mercado con
el fundador.
Personalidad
Un tercer rasgo es que el fundador siente tal química con lo que está intentando levantar que
prácticamente lo está haciendo para sí mismo. Esta característica se da porque, en un founder
market fit, el fundador suele también formar parte del target del negocio que está desarrollando;
de ahí que tengan altos conocimientos del sector y que posiblemente se hayan encontrado con
una necesidad que no les quedó satisfecha.
El fundador por lo tanto conoce perfectamente a su target porque él/ella es uno más; comparte
sus aficiones, su lenguaje, sus rasgos, sus intereses y transmite así una gran atracción positiva
hacia las personas a las que se parece y que conforman su clientela.
Experiencia
Con experiencia no nos referimos a haber emprendido anteriormente o haber trabajado ya en el
sector. En realidad, en lo que a experiencia se refiere el fundador suele ser una persona que se
conoce bien el sector y ha estado mucho en contacto con este pero que también tiene espacio
para la innovación y la disrupción.
Este rasgo, sin embargo, varia según el tipo de negocio del que se esté hablando. En un negocio
B2C el fundador tan solo necesita tener la experiencia necesaria para entender el sector; sin
embargo, en los negocios B2B y los negocios del sector Biotech sí que necesitan fundadores con
experiencia formal y larga en el sector dados todos los conocimientos técnicos que se requieren.
Se puede ver así cómo el founder market fit conforma un fuerte potencial para el éxito del negocio
en cuestión dada la compatibilidad del fundador con la idea de negocio. Es por ello que el founder
market fit también potencia mucho la confianza y la credibilidad por parte de los posibles
inversores, motivo por el cual estos siempre buscan negocios con un claro market fit.
Si bien hay rasgos inherentes que se pueden detectar al hablar con pasión y al exponer
conocimientos, hay una serie de preguntas que los inversores suelen realizar para testear si hay
founder market fit.
Son preguntas como:
- ¿Por qué tu equipo es el adecuado para llevar a cabo este proyecto?
- ¿Qué te distingue y te destaca por encima de tus competidores?
- ¿Dónde te ves dentro de 1, 5 y 10 años?
- ¿Qué harías si la junta te quisiera reemplazar como CEO?
- ¿Por qué razón dejarías de construir esta compañía?
Además, el founder market fit suele estar muy presente en todas aquellas startups que triunfan y,
por el contrario, no suele estar en aquellas que fracasan.